Hoy 31 de Mayo de 2013, pongo fin a este blog que comenzó por aquel mes de Marzo.
Para finalizar con este blog, en el cual he pasado mucho tiempo, me gustaría concluirlo con el proyecto de Huellas de la Ciudad.
Cuando nos propusieron dicho proyecto no sabíamos que hacer, pero a la vez que pasaba el tiempo, las ideas venían y se iban de la misma manera. Hasta que un día nos juntamos 5 compañeros y empezamos a matizar ideas, que si una cosa de aquí, que si otra de allí y así sacamos la idea final.
La idea ha pasado por muchas etapas de reflexión como anteriormente he comentado, también de cambios, risas y sobretodo buenos momentos.
Al principio pensamos en que podíamos hacer algo que no estuviera muy visto, basándonos en los lugares más escondidos de Segovia.
Otra idea paralela a ésta, era elegir cada miembro del grupo un logo o marca de identificación e ir haciendo un recorrido dejando esta marca, este recorrido podría haber sido, como lo hicieron otros años, desde casa a la universidad. Pero desechamos esta idea, ya que la zona donde está ubicado el nuevo campus es una zona a nuestro parecer poco mágica.
De ahí llegamos a la idea de hacer un recorrido o varios, por
una zona que de verdad nos llamara la atención y que nos transmitiese ese “nosequé”.
Corría la semana del titirimundi y estaba puesto el carrusel.
Viendo esto y sabiendo que a dos de nosotras nos gusta mucho la película de Amelie, se nos ocurrió la idea de hacer
un video simulando una escena de dicha película, en la que sale mesesel
carrusel.
Aquí esta nuestra idea principal y la base del resultado
total.
Esta escena de Amelie, comienza
con una llamada de teléfono, cosa que hemos añadido en el video final. La
llamada la recibe uno de los protagonistas de la película y le dicen desde el
otro lado del teléfono que siga una serie de flechas, el hombre las sigue
corriendo hasta que llega a un mirador. Todo esto está presente en nuestro
video, desde el mirador el joven ve como Amelie
le deja un libro en la mochila que lleva en su vespa. Él baja corriendo y
coge el libro en el que se encuentra una composición de imágenes en la que pone
“Quiere usted conocerme”. La idea que
sacamos de aquí era versionar esta frase: “Quiere usted conocer Segovia”. Pero
todo esto impulsado por el entusiasmo y el nacimiento continuo de ideas se
trasformó tanto que acabo derivando en una idea propia y original que conjugaba
varias partes de todas las ideas que ya habíamos dicho, predominando la idea de
versionar la escena de Amelie. La
cabina se transformó en un teléfono móvil, la carrera del joven se transformó
en una carrera entre tres de los cinco componentes del grupo y el objetivo o la
meta, que en la película de Amelie
era el libro, se transformó en un regalo, que más tarde decidimos que no iba a
ser físico sino un regalo que nos hiciera ver aquellos pequeños detalles que
habíamos pasado desapercibidos en la ciudad.
Con la idea ya en mente, salimos a grabar.
Durante la grabación del proyecto lo hemos pasado realmente bien, nos hemos reído, nos hemos enfadado, pero ante todo siempre hemos estado unidos.
Me gustaría dar las gracias a mis compañeros, Miguel Barcena, Ángela Balbás, Héctor García y Marta González, ya que sin ellos esto nunca hubiera sido posible. También me gustaría decir que a parte de ser compañeros son amigos, amigos de verdad, ya que he convivido durante 9 meses, día y noche junto a ellos, y la verdad que no me arrepiento de ello. Son grandes personas.
GRACIAS POR TODOS LOS MOMENTOS QUE HEMOS PASADO =)