Muchas veces nos preguntan que si nos acordamos de todos
nuestros profesores o de alguno ellos. Desde mi punto de vista quedan más marcados los buenos profesores, ya que nos
hacen ver la vida en la escuela de una manera más atractiva para nosotros. Pero
también recordamos a aquellos profesores
que nos lo han hecho pasar peor o de una manera menos atractiva.
Un buen ejemplo de lo que anteriormente he comentado es el vídeo visionado en clase.
En dicho video se puede observar como el profesor japonés
Kanamori enseña de una determinada
manera a sus alumnos, en donde se puede
ver como ellos se siente felices por realizar sus tareas ya que para ellos es
divertido. Lo que el profesor intenta es que sus alumnos aprendan de una manera
diferente, es decir, que se sientan atraídos para realizar sus respectivas
tareas.
También se puede ver como él intenta que saquen a la luz sus
recuerdos más fuertes, aquellos recuerdos que no se quieren recordar porque
causan dolor. Gracias al profesor japonés los alumnos de dicha escuela sacan a la luz
sus emociones y sus propias experiencias.
Yo pienso que este es un buen método para que los alumnos se
sientan más atraídos por la escuela y que a su vez muestren sus miedos y
debilidades para que otros como dicho profesor los ayude y los aconseje.
En mi propia experiencia como alumna, recuerdo gran parte de
mis profesores, me atrevo a decir que me
acuerdo de todos. Ya que cada uno de ellos me han aportado algo diferente a mi
vida.
Por otro lado, también es verdad que me acuerdo más de los
buenos profesores, ya que gracias a ellos las tareas se me hacían más amenas y
en sus clases me sentía a gusto.
Un claro ejemplo de estos profesores puede ser mi profesora
sustituta de tercero de primaria, cuyo nombre era Ana. Gracias a ella puede corregir
mi problema de dislexia y sus clases eran agradables. También la recuerdo ya
que se preocupaba por nosotros y nos ayudaba en todos los problemas que
pudiéramos tener. Cuando ella se marchó nos dio su dirección y nos dijo que la escribiéramos, para así no perder el contacto con nosotros.
Otra profesora que me ha marcado fue mi profesora Pili. Ella
fue la primera profesora de toda mi larga carrera estudiantil, ya que fue mi
profesora en parvularios Con ella he vivido momentos inolvidables, como es por
ejemplo mis primeras lecturas, mis primeras escrituras, etc.
Por el contrario también tengo recuerdos bastante malos de
algunos de mis profesores, ya que la manera en la que me trataban y la forma de
dar las clases no me inspiraban nada y el aburrimiento se apoderaba de mí
constantemente.
Un ejemplo de ello es mi profesora Rosa María, la cual
siempre me sentaba en la última mesa de la clase porque decía que era un “rabo
de lagartija”. De dicha profesora solo tengo recuerdos malos, ya que por ese
mote que me puso, mis compañeros se burlaban de mí constantemente.
Pero de lo bueno y de lo malo siempre se aprende, y la
verdad que no guardo rencor a nadie por las decisiones que tomaron en su
momento. Todo se hizo por alguna causa.
Ahora gracias a ellos, soy una persona que está estudiando una carrera universitaria,
y sin ellos, tanto los buenos como los malos, no hubiera sido posible.
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